Los beneficios de la leche materna son conocidos desde hace tiempo, pero
ahora un equipo de científicos ha descrito una singular cualidad que
hace que la leche materna sea mejor que la leche de fórmula para
proteger a los bebés contra infecciones y enfermedades.
Este
estudio es, que se sepa, el primero en el que se hace un análisis
detallado de los efectos que la nutrición del bebé tiene en la manera en
que crecen las poblaciones bacterianas del interior del cuerpo. La
nueva investigación también brinda datos valiosos sobre los mecanismos
subyacentes en la ventaja que la leche materna tiene sobre la leche de
fórmula en la alimentación de bebés.
El estudio, a cargo del
equipo de William Parker, de la Universidad Duke en Durham, Carolina del
Norte, Estados Unidos, se centra especialmente en cómo la leche
materna, y no la leche de fórmula, hace que en el tracto intestinal de
los bebés prosperen colonias de microbios beneficiosos, los cuales
ayudan a la absorción de nutrientes y al correcto desarrollo del sistema
inmunitario.
Un conocimiento lo bastante detallado de las
características que confieren a la leche materna esa capacidad de
promover una flora microbiana beneficiosa podría ayudar a encontrar
sucedáneos de leche materna mucho más parecidos a ésta en tales
características, de modo que promovieran también el desarrollo de esas
comunidades beneficiosas de microbios.
Estudios anteriores han
mostrado que la leche materna disminuye la incidencia durante la
infancia de diarreas, la gripe (o influenza) e infecciones
respiratorias, a la vez que protege contra el posterior desarrollo de
alergias, diabetes tipo 1, esclerosis múltiple y otras enfermedades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario